Josué 2 - Rajab la prostituta

Primero Dios, con Gerardo Farías

May 5 2024 • 6 mins

El libro de Josué relata la historia de la conquista de la Tierra Prometida, la tierra de Canaán. Y el primer objetivo es Jericó. Josué, al igual que Moisés, decidió enviar 2 espías para que reconocieran el territorio a conquistar. Pero estos espías fueron descubiertos. Los espías se refugiaron en la casa de una prostituta (la única casa que le abriría la puerta a unos extranjeros en tiempos de guerra). Allí los espías (de quiénes no se nos dan los nombres) encontraron a Rahab, quién demostró ser una mujer de fe en el Dios verdadero. Ella interpretó todo lo que había sucedido con Israel, como una clara evidencia de que el Dios verdadero estaba con ellos. Ella arriesgó su vida para salvar a los espías, y pidió que se le recompensara con su vida y la de su familia cuando llegar el momento de la conquista. Los espías aceptaron con una condición: el cordón escarlata con el que ella les permitió huir, debía permanecer en la ventana (quizás como señal para que el ejército de Israel supiera a quienes debían perdonar la vida); y que todos sus familiares debían permanecer dentro de la casa. Es interesante que en hebreo, la palabra cordón se parece mucho a la palabra esperanza. Esta historia nos recuerda a la historia de la Pascua. En ambos casos la salvación dependía de la confianza y la obediencia: se debía pintar la puerta con sangre; y se debía dejar un cordón escarlata si se deseaba ser salvo. Hoy, por la fe en Jesús nosotros también podemos alcanzar la salvación. No importa cuál haya sido nuestro pasado, por la fe en Él, y en lo que Él hizo por nosotros, podemos alcanzar el perdón de nuestros pecados, y la redención. Que en nosotros también se hallada la fe que se encontró en Rahab. Que el Señor te bendiga.