El pasado verano murió Bill Russell. ¿Sabes quién era Bill Russell? Uno de los grandes jugadores de baloncesto de todos los tiempos. Tengo que confesarte que hasta hace unos días yo tampoco lo sabía. No soy un gran aficionado al baloncesto. De hecho, para poder hablarte ahora de él he tenido que consultar algunas páginas de Internet. Luego te contaré qué es lo que me ha despertado curiosidad de este personaje y lo entenderás. Pero primero, te contaré algunas cosas de su biografía…

En otra ocasión te hablé ya de la Librería de Medios de Barcelona. Era una librería especializada en temas de comunicación, marketing, branding, cine… Si te interesan estos temas, podías pasarte un buen rato, porque tenías mucho donde elegir. Y siempre te acababas rascando el bolsillo.–Hola, buenos días. Hace unos meses me aconsejaste Marca personal para dummies. Y me pareció muy bien. ¿Tienes algún otro libro sobre marca personal? Entonces me enseñó dos o tres libros y me destacó uno. Me dijo que se estaba vendiendo bastante y estaba gustando: Creative personal branding, de Jürgen Salenbacher. Tenía buena pinta. En la contraportada estaba escrito: "Descubre tus fortalezas y haz de ellas tu señal de identidad para optimizar tu desarrollo personal y profesional". Interesante, sí. Lo compro, pensé.***********************Entrevista a Jürgen Salenbacher:https://youtu.be/A8QOJNxNcmQ

La semana pasada vimos el caso con el que se encontró Andrés, tutor de 1º de Bachillerato y el castigo injusto que el profesor de Matemáticas impuso a un alumno. Nos quedamos sin saber cómo reaccionó Andrés, después de la sorpresa inicial, y qué dijo a los padres de Carlos. Si no has tenido oportunidad de escuchar el episodio de la semana pasada, te sugiero que hagas ahora pausa de éste y vuelvas atrás. Nos volvemos a encontrar aquí mismo. Ya sabes: se encarga el podcast de devolverte donde has dejado a medias un episodio.

Debemos situarnos en un viernes cualquiera del curso en una escuela de capital de provincia, un centro de una sola línea. La historia me la contó Andrés, que entonces era el tutor de 1º de Bachillerato. Carlos, un chico de su curso, se había marchado con síntomas de enfermedad a casa sobre las doce. Y ese mismo día a las doce y media, tres alumnos de la clase, que sabían que el profesor de Mates se había ido de colonias con los de 4º, se marcharon a casa dos horas antes.A partir de esta historia, analizamos cómo gestionar el descontento por nuestros errores.

Hoy he tenido una discusión con ChatGPT sobre la ventana de Johari. Me ha dicho algunas cosas que me resultaban raras. Le respondí que no, que se estaba equivocando, y enseguida me ha dado la razón. Tengo la sensación de que siempre que lo corriges te da la razón. Tendré que comprobarlo, corrigiéndole con una tontería algo evidente que me haya dicho. Pero en este caso, puedo asegurarte que sí se había equivocado. Ahora te lo cuento.La ventana de Johari es un modelo que describe la dinámica de la comunicación interpersonal y la conciencia que tenemos de nosotros mismos y de los demás. Es una herramienta práctica que sus autores utilizaban en las dinámicas de grupo.La ventana de Johari puede ser una herramienta útil:para que desarrolles y gestiones tu marca,para que seas más consciente de tus cualidades y talentos y cómo están influyendo en tu imagen profesional,para que sepas pedir el feedback constructivo a colegas, directivos, padres e incluso a los estudiantes, y así puedas identificar aspectos que te ayuden a crecer,para que planifiques mejor la comunicación de aquellas cualidades que ves que los demás no conocen,para que expreses tus emociones de forma auténtica y coherente.En resumen, es una herramienta que puede ayudarte a dejar marca de una forma más consciente y valiosa.

Hace unos días reflexionamos sobre nuestras habilidades y nuestros defectos, sobre aquellas cosas que se nos dan con facilidad y las que nos cuestamos más. Eran los episodios 17 y 18. Hoy volveremos a reflexionar y lo haremos pensando en cuáles son nuestros valores. Necesitarás boli y papel, teclado o algo que escribir.Tú, como cada uno de nosotros tiene unos valores, que son personales y únicos. Bien. Cuando digo que tienes unos valores, podría decir que vives unos valores. Porque los valores no los tienes, si no los vives. Esto está claro. Los valores no se encuentran en lo que decimos, sino en lo que hacemos.Los valores son aquellas creencias y convicciones que van guiando tus decisiones y acciones. Y no es que sean algo externo a ti. Son intrínsecos a tu identidad, porque están injertados en tus propias experiencias, convicciones y circunstancias de vida.

La reunión se celebraba en el salón de actos de uno de los colegios del grupo escolar. Había personas de la dirección y responsables de marketing de cada una de sus escuelas. En total debían ser una treintena de personas. Me invitaron a que hiciese una intervención, una charla. Antes había habido otros dos parlamentos. Se veía en los rostros de la gente que empezaban a estar saturados. Necesibaba dar un golpe de efecto si quería reclamarles la atención. Cuando me tocó hablar a mí empecé así:–Hoy estamos aquí hablando del marketing educativo de vuestros colegios. Pero a los que hacen el marketing, nadie les han invitado. Aquí estáis los responsables de marketing. Vosotros sois usted quienes planificáis el marketing, pero no quien lo hace.

Imaginemos que necesitas que te impriman una tarjeta de visitas. La haremos muy bonita. Te pondremos el nombre con una letra bien visible. Y justo debajo, tu cargo… ¿Qué cargo ponemos? ¿Eres tutora de 4º B de Primaria? Pues pondremos DIRECTORA DE 4º B DE PRIMARIA.Sí, cómo lo sientes. La escuela te ha delegado la responsabilidad directiva de esta asignatura. ¿Te parece poco importante? ¿Puede decirme, pues, qué hay más importante para tu alumnado y para sus familias?

Eisenhower fue un general y político de Estados Unidos. Destacado líder militar en la Segunda Guerra Mundial. Dirigió a las fuerzas aliadas en Europa y fue responsable de la planificación y supervisión del desembarco de Normandía. Tras la guerra, fue el primer comandante supremo de la OTAN y después el 34º presidente de Estados Unidos de 1953 a 1961. En un discurso el día 12 de enero de 1954 Eisenhower citando a un rector de universidad afirmó: “Tengo dos tipos de problemas, los urgentes y los importantes. Los urgentes no son importantes, y los importantes nunca son urgentes”. A partir de esa idea, Eisenhower desarrolló un método para priorizar las tareas según su urgencia e importancia. Esta es la matriz de Eisenhower:https://brandingescolar.com/wp...

En el episodio anterior te planteé una pregunta: “¿Qué haces muy bien mejor que los demás? ¿En qué destacas?”. Espero que tengas anotadas unas cuantas cosas, sobre todo una que destacará por encima de otras.También te sugerí que validases estos puntos fuertes pidiendo la opinión de algunas personas que te conozcan bien y te aprecien.Bien, ahora toca, que hablemos de las cosas que no haces bien. Porque todo el mundo tenemos cosas que no hacemos bien. ¿Estás listo para pensar? ¿Tienes bolígrafo para escribir? ¿Lo harás en el mismo móvil? Pues venga, a pensar…En todo este ejercicio, lo que tendrás que hacer es:reconocer tus defectos,aceptarte y quererte tal y como eres en lo que nunca cambiarás, encarar los defectos que provienen de tu actitud.

Hoy haremos un episodio distinto. Más que escuchar todo el rato, hará falta que pienses y escribas. Necesitarás tener delante, papel y bolígrafo. O un teclado en el que te sea fácil escribir.Si quieres tener una buena reputación, si quieres ser un profesor o profesora que deja marca, en primer lugar tendrás que conocerte muy bien. Después podrás concretar metas y comunicar a los demás el valor que les ofreces. A quien no sabe hacia dónde navega, cualquier viento le valdrá. Pero no bastará con saber dónde vas. También necesitarás saber de dónde vienes. La primera pregunta que debes hacerte es: “¿Qué se te da bien?” "¿Qué haces muy bien?".

Había una vez una profesora joven y con muchas ganas de marcar la diferencia en el mundo escolar. Pongámosle un nombre diferente al suyo. Le llamaremos Marta. Porque Marta auténtica –la que no se llama Marta– prefiere continuar en el anonimato.Marta trabajaba en Secundaria en un Instituto donde el ambiente era tenso y la carga de trabajo elevada. Marta se sentía constantemente estresada y agotada. No podía mantenerse en el día a día con sus tareas ordinarias, con las asignaturas que eran nuevas para ella…

Hemos pasado ya los 15 episodios del poscast. Poco a poco vamos sumando minutos. Una persona que los ha ido escuchando me ha preguntado hoy. ¿Qué estructura tiene este podcast? Parece que vas pasando de un tema a otro sin más… Pues sí. Cierto, voy pasando de un tema a otro, porque el podcast no tiene una estructura definida. Es que intento que no sea un audiolibro por capítulos. Si quisiera hacer un audiolibro, lo pondría en Audible o en alguna otra plataforma de libros y no en Spotiy, Apple Podast, Ivoox, etc. Es un podcast y por eso, efectivamente, voy pasando de un tema a otro, a partir de anécdotas, de hechos o frases que me vayan sugiriendo ideas que se me ocurre que te pueden servir.Termino el episodio con un consejo: no exageres.

¿Sabes que una vez existió como premio el Óscar al mejor orador público? Digo una vez, porque realmente fue una sola vez. Se celebró un año. Existe, pues, una persona que ganó la primera y última, la única, edición de este Óscar al mejor orador público. Elmer Wheeler. ¿Quién era Elmer Wheeler? Estamos hablando de un vendedor estadounidense de mediados del siglo XX. Escribió un buen número de libros con consejos sobre cómo vender. Era también gran conferenciante; de lo contrario, no habría tenido el único óscar de oratoria. En algunas de sus conferencias sobre llegaron a tener 20000 asistentes, 20000 vendedores ávidos de aprender cómo vender mejor.Decía Wheeler a los vendedores que debían manifestarse siempre con tres S: Sinceridad, seguridad y sonrisa.

El segundo año de profesor me encargaron ser el tutor de 2º de BUP, el actual 4º de ESO. Era un profesor joven, con un curso y medio de experiencia. Entonces me gustaba repetir: "Cada familia tiene la tutoría que se merece". Lo decía porque había experimentado que los padres confiaban en mí, a pesar de mi inexpertez, seguían mis sugerencias y entre todos –así lo veía– conseguíamos sacar a su hijo adelante.Sin embargo, con otros notaba por su comunicación no verbal, que algo no acababa de convencerles y no conseguía crear un clima de confianza, a pesar de mis esfuerzos. Enseguida comprobaba cómo tampoco su hijo creía en lo que yo le decía. Y la cosa no salía bien.¿Cada familia tiene la tutoría que se merece?Ahora me sonrío de la seguridad con la que hacía esta afirmación. ¿Acaso, como tutor, no tenía yo ninguna responsabilidad sobre la mucha o poca confianza de las familias? Es evidente que sí, que algo puede hacerse para reconducir la desconfianza. O para incrementar la confianza. ¿Cómo hacer, pues, para generar confianza en las familias?

En el episodio anterior te comenté cómo un actor teatral de monólogos me contaba –prácticamente, en un monólogo público improvisado– que todos interpretemos un papel determinado en la escuela. Decía que elegimos ser víctima, espectador, protagonista. Entonces fue cuando le pregunté curioso: –Y, pues, ¿cuál es el papel que te parece que debo desempeñar?

Habíamos ido con los alumnos a ver a un monólogo en un teatro de Barcelona. Cuando terminó la representación, el actor se quedó en el escenario, para que los alumnos le pudieran hacer todas las preguntas que quisieran . Me sentí empujado yo a romper el hielo con una primera pregunta, que al fin y al cabo acabó siendo la única. Le pregunté si no le pasaba que a base de actuar sin darse cuenta, estaba haciendo teatro en su actividad diaria.Su respuesta me sorprendió mucho.

Durante la pandemia todos aprendimos a usar plataformas que nos permitían encontrarnos online desde la sala de estar. La primera vez que hice un webinar sobre marca personal del docente fue con las Escuelas Católicas de América. Muchos profesores y profesoras se extrañan de que les hable de marca personal. ¿Tú también?

¿Quiénes son tus clientes? Sí, clientes. Porque tú, tienes clientes…Espera, espera. No te vayas todavía. Que te cuento bien y verás que sí, que esto tiene sentido.Es verdad que ordinariamente vinculamos la palabra cliente al mundo mercantil y, visto así, nada tendría que ver con la educación. Pero escucha bien lo que te cuento.

¿Conoces la historia del patito feo? Deja que te lo cuente:Érase una vez, en el lejano siglo XX, una profesora de música… Sí. Ya ves. No es la versión que tú conocías. Es otra, pero muy real.Presta atención, porque lo que te contaré te hará pensar.