Por un lado, Bitcoin ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, convirtiéndose en una forma popular de inversión y almacenamiento de valor. Sin embargo, actualmente todos los movimientos que están viendo en el mercado actual de las criptomonedas son confusos y nada confiables por otra parte su volatilidad y falta de respaldo por un activo subyacente hacen que invertir en Bitcoin sea considerado una inversión arriesgada. Por otro lado, Tesla es una empresa reconocida por su innovación y liderazgo en la industria de los vehículos eléctricos. A pesar de que ha enfrentado algunos desafíos en el pasado, la empresa ha demostrado un crecimiento sólido y constante en los últimos años, lo que la hace una opción de inversión atractiva para algunos inversores.