El significado es directo: como personas somos responsables de nuestras acciones. Y nos cabe un castigo por un mal comportamiento. Si la hicimos, tendremos que pagarla. El dicho justifica penalizar o indemnizar por algún descuido o torpeza.
Idea, guion y locución: Hugo Paredero - Producción: Lorena Vazquez - Edición: Soledad Zunino - Diseño de portada: Jazmín Guzmán