Esta semana los líderes mundiales están reunidos en las Naciones Unidas, como lo han hecho durante los últimos 78 años, con el lema: “Restablecer la confianza y reactivar la solidaridad mundial”.
Sin embargo cumplir esta meta no parece posible. En las propias palabras del Secretario General Antonio Guterres: “Las tensiones geopolíticas están paralizando la toma de decisiones inmediatas para la coyuntura actual. Hay un nivel de división entre los superpoderes, que no tiene precedentes desde la Segunda Guerra Mundial”.